En Casa Bolívar el 17 de abril se realizó un foro crítico sobre la formación del PS de Chile (19 abril 1933). El foro fue organizado por el CEFB, contó con las ponencias de Eduardo Gutiérrez ex integrante del Comité Central y actual dirigente del Partido Constituyente; Manuel Cortés internacionalista, integrante de la Brigada Salvador Allende (BRISA), ex miembro del GAP y del CC del PS y Roberto Muñoz. Centro de Estudios
Francisco Bilbao.
Ponencia del CEFB.
Antecedentes de la
formación del Partido Socialista de Chile
Roberto Muñoz. Centro de Estudios
Francisco Bilbao
I
La formación del PS de Chile es
parte de la historia de luchas del pueblo chileno y de la clase obrera en
particular.
Si bien tiene un curso de
formación netamente chileno y endógeno, es resultado de una serie de
características y momentos históricos muy específicos, tanto a nivel nacional
como regional y mundial.
1 Nacido en un período de entre
guerras, en que el espectro de la revolución soviética es tremendamente
relevante y en pleno desarrollo de la potencialidad del gobierno soviético,
luego de la guerra civil, es también importante decir que ya hay certeza que no
habrán revoluciones obreras en el corto plazo; y al contrario se va conociendo
el desarrollo en Europa de la aparición de un fenómeno nuevo como es el nazismo
y el fascismo, elementos que no son ajenos del todo a la formación del PS.
2. En el continente, luego de la
revolución mexicana, se va estabilizando un gobierno revolucionario en México,
con gran influencia sobre todo en el plano cultural. Cabe mencionar la
invitación del presidente Lázaro Cárdenas a la poetisa Gabriela Mistral para
realizar una serie de charlas por los estados.
Existe un ambiente cultural
empapado de los resabios de lo que fue la gran lucha por la Reforma
Universitaria de los años 20, que en todo el continente forjó una generación
completa de intelectuales ligados por sentimientos de compañerismo y hermandad
ideológica que también se reflejó en contactos y relaciones entre políticos de
nuestros países.
3. Desde Perú llega la influencia
del APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana), que pretende ser un
referente y orgánica política continental. Esta organización, reprimida en su tierra,
con su fundador Raúl Haya de la Torre exiliado y posteriormente, luego de una
fallida intervención electoral en Perú, es encarcelado por rechazar los
resultados y liderar una rebelión, entre 1932 y 1933., genera una serie de
exilios hacia chile de intelectuales y artistas, que vivirán en nuestra tierra
por muchos años. Éstos generan una gran influencia en distintas esferas, como
la cultural, periodismo,, editoriales, y también en la política.
Un ejemplo es el discurso del
intelectual y parlamentario del Partido Social Republicano, Carlos Vicuña
Fuentes, en apoyo a la libertad de Haya de la Torre, en 1933, quien indica:
“este sentimiento de
americanidad, esta necesidad de desarrollar entre nosotros la solidaridad
americana, que mañana nos salvará en la lucha inevitable contra nuestra enemiga
la raza sajona, es lo que me impele a pedir que la Cámara se interese por este
hombre superior”.
También es significativa la
relación establecida por Luis Alberto Sánchez, con Oscar Schnake y Eliodoro
Domínguez y por supuesto con Salvador Allende.
II
Así llegamos a los antecedentes
inmediatos de la formación del PS, indicando que las principales agrupaciones
socialistas que se constituyeron en 1931-32 fueron: la "Nueva Acción
Pública" (NAP), la "Acción Revolucionaria Socialista "ARS), el
"Partido Socialista Marxista", el "Partido Socialista
Unificado" y la "Orden Socialista".
Sobre este punto dice el
historiador JC Jobet:
“La revolución socialista del 4
de Junio de 1932, las persecuciones posteriores y la violenta reacción del
gobierno de Alessandri fortalecieron la conciencia de los grupos socialistas en
el sentido de unificarse y crear un sólido partido. La desvergonzada reacción
fascistizante de la segunda administración de Alessandri puso a la orden del
día la necesidad de llegar a la rápida constitución de un poderoso partido
revolucionario de la clase trabajadora chilena. Como respuesta a sus primeras
facultades extraordinarias, ocultos y perseguidos muchos de sus dirigentes, se
fusionaron la NAP, la ARS, el Partido Socialista Marxista y la Orden
Socialista, dando nacimiento al PARTIDO SOCIALISTA DE CHILE el 17 de abril de
1933.”
Respecto al fracaso de la
República Socialista, entre otras cosas, como división y fragmentación de los
sectores revolucionarios, falta de homogeneidad en los equipos dirigentes,
incapacidad para derribar el aparataje del estado, ausencia de un partido
disciplinado, se indica la “falta de una fuerza armada popular”
Asimismo el historiador Patricio
Quiroga, indica que –junto con los datos aportados por Julio César Jobet-
respecto a la crisis económica del 29; la lucha entre las centrales obreras de
la IWW, Trabajadores Industriales del Mundo (anarquista) y la FOCH; el
reformismo oligárquico de Arturo Alessandri; las secuelas de la dictadura de
Ibañez; los diversos intentos de golpes de estado; y la efímera república
socialista del 4 al 16 de junio de 1932, todos antecedentes de la formación del
PS, es significativo que esta fundación es un elemento de “institucionalización
de la política” y de “contribución a la consolidación del proceso de
construcción democrática”, que habrían permitido un desarrollo posterior dentro
del marco de la democracia republicana.
Para el análisis actual, sería
bueno tomar al menos dos elementos que son significativos y que creo han
moldeado el accionar, no sólo del PS; sino que a las fuerzas populares en
Chile:
Primero: El no poseer ni
constituir una fuerza militar propia, no tener una concepción y una doctrina
militar, que permita la defensa del proyecto popular, que tan caro significó
para efectos, por ejemplo, de la defensa del gobierno popular de Salvador
Allende.
En segundo lugar, el considerar o
establecer como fundamento de la creación y desarrollo de una fuerza obrera,
popular y revolucionaria, el objetivo de aportar a la concreción de la
estabilidad institucional y de apoyar o pretender apoyar a ese engendro burgués
que es –a fin de cuantas- la institucionalidad republicana, que no es otra cosa
que la dominación de la oligarquía y los factores de poder, tanto
empresariales, como las fuerzas políticas de derecha y sus colaboradores, y las
fuerzas militares, encargadas en último término de defender el estado actual
imperante, que es el que en todo momento actúa en nuestro país: la dominación
de la élite gobernante.
Son estos elementos los que
quisiera poner en consideración y discusión en este nuevo aniversario de una
organización en que miles de mujeres y hombres han puesto no solo su esfuerzo y
potencialidades, sino que también su sangre y sacrificios enormes para llevar a
cabo estos ideales, por los que saludamos a los revolucionarios que hicieron
posible las grandes luchas del Partido Socialista de Chile, y reconocemos,
entre otros y otras a Beatriz Allende, Elmo Catalán, las direcciones
clandestinas detenidas desaparecidas en Junio de 1975, encabezada por el obrero
portuario y ex dirigente de la CUT Exequiel Ponce Vicencio.
También formaban parte de esa
Dirección el ex dirigente de la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile,
ex Secretario General de la FECH, Secretario General de la Juventud Socialista,
Coordinador de las Juventudes de la Unidad Popular y Diputado por Valdivia al
momento del golpe cívico militar, el Doctor Carlos Lorca Tobar, así como el más
joven de la Comisión Política del PS, destacado intelectual y jefe político,
Ricardo Lagos Salinas, Detenidos Desaparecidos hasta hoy. Junto a ellos
corrieron la misma suerte sus enlaces Carolina Wiff, Michelle Peña, Mireya
Rodríguez, Sara Donoso y Rosa Solís.
A ellos y ellas, como a miles de
otros militantes y combatientes, entre ellos los internacionalistas, que
siguieron los ejemplos de una organización indoamericanista, nuestro mayor
reconocimiento y respeto.